viernes, 31 de diciembre de 2010

Todo lo que podríamos haber sido tú y yo si no fuéramos tú y yo. Libros que encandilan.

Todavía quedan libros que empiezas a leerlos a las nueve de la noche y te envuelven entre sus frases de tal forma que para cuando dan las dos de la madrugada ya los has terminado.
Minuto arriba, minuto abajo, eso es lo que me sucedió la otra noche con Todo lo que podríamos haber sido tú y yo si no fuéramos tú y yo de Albert Espinosa. 

La historia nos presenta a un joven, Marcos, que, tras la dolorosa muerte de su madre, no está dispuesto a permitir que su mundo permanezca inmutable. Es por ello que ha decidido hacerse con una costosa medicina que le permitirá dejar de dormir. Mientras está decidiendo si inyectarse la sustancia,  descubre, a través de su vetana, a una chica en medio de la plaza de Santa Ana.

Marcos continúa cautivado por la desconocida cuando, de repente, suena el teléfono. Es su jefe: tienen retenido en los despachos a un extraterrestre. Marcos es el único que puede aportar algo de luz  ante este peculiar caso porque tiene un don muy especial...

A lo largo de este fascinante relato, Espinosa realiza una profunda radiografía de los sentimientos humanos: amor, sexo, deseo, ternura, pasión, cariño, celos, envidia, terror, odio, morbo, tristeza, incertidumbre...

Nos encandila, nos seduce y, finalmete, nos enamora. No nos muestra sólo la cara amable de la vida, sino que también revela al lector su visión más desgaradora y trágica. Es esa perfecta combinación la que impide que separemos la vista un segundo de las letras.

La historia de Espinosa trata del amor, pero no es una novela rosa que hable del amor frívolo y burlesco. Es amor a todos los niveles, un amor real que supera la muerte, que traspasa la vida.

A nivel formal, la narración del autor favorece enormemente la caracterización de los personajes. La empatía que genera el lector es tan fuerte que incluso se podría decir que llegan a encantarnos. Además, sus personajes están bien construidos, son ricos en matices y fieles a su propia personalidad. Por ello, también destaca la coherencia en el relato.

No acostumbro a leer libros de temática amorosa. Con demasiada frecuencia, sus autores tieneden a confundir romanticismo con obesión, imbecilidad y embobamiento. Pero, sin duda, Todo lo que podríamos haber sido tú y yo si no fuéramos tú y yo es capaz de enamorar a insensibles ojienjutos como yo.


[NOTA: a petición de los lectores, se rebajan los niveles en brillo y saturación de las entradas para facilitar su lectura desde los dispositivos móviles. También se añaden canciones de Queen al Mixpod. La de Bowie no ha sido una sugerencia, la he puesto porque me apetecía.]

La entrada que no debería existir

He estado dudando durante unos cuantos días si escribir una entrada sobre el cese de emisión de CNN y su sustitución por un canal de Gran Hermano 24 horas. Finalmente, he decidido no hacerlo debido a que requeriría un registro no apropiado para el tono de este blog. Es decir, que no quiero utilizar las palabras malsonantes que se me ocurren cuando pienso en esa aberración.

2010 será el año en que se eliminó la publicidad en TVE...pero también en el que la telebasura se impuso al periodismo.

domingo, 26 de diciembre de 2010

Lo mejor de la Navidad

INT. PISO FAMILAR, PASILLO - DÍA

Un pasillo largo pintado en tonos veige con una puerta al fondo. Un NIÑO de tres años, pelo rubio cortado a tazón y ojos azules enormes, arrastra una caja de hojalata con dibujos de Mickey Mouse por el suelo. 
TÍO
(En off, desde el salón)
¡No arrastres eso que vas a arañar el parqué!

Por la puerta de fondo aparece ENTROPÍA, no más de 20 años, lleva unos pitillos y un jerséy morado. Se acerca hasta el NIÑO, coge la caja del suelo. El NIÑO la mira entornando los ojos. ENTROPÍA le da la caja, él la agarra rápidamente y la esconde detrás de su espalda.

ENTROPÍA sonríe. El NIÑO la mira con cara de enfado entornando los ojos cada vez más.

NIÑO
Tonta

ENTROPÍA finge indignación, se tapa la boca con una mano.

ENTROPÍA
Tonto tú.

El NIÑO sale corriendo hacia la puerta del fondo. ENTROPÍA se ríe, se marcha detrás de él.

NIÑO
(En off, desde el salón)
Paaaaaaaaapi, esa primita me ha llamado tonto.

ENTROPÍA llega junto a la puerta y se apoya en el quicio sonriendo con burla.

jueves, 23 de diciembre de 2010

Sobre la pintada del Café Central

Ese lugar huele a Jazz, sus paredes me lo han dicho. No me importa que sea un producto comercial destinado a atraer turistas. Siempre tendrá su encanto propio.

A veces pienso que la vida es un poquito como esa pintada en el servicio de señoras del Café Central: <<Dani, creía ver tu cara por las calles de Madrid >> No sé si la cito textualmente, aunque, en esencia, dice eso aproximandamente.

Es muy llamativa. Escrita con lápiz rojo (Dani...) todo en mayúsculas (...creía ver tu cara...) en mitad de la pared (...por las calles de Madrid). Lo interesante es que pueden existir cientos de historias detrás de esa frase.

Cuando la vi, la primera que se me ocurrió era un poco desgarradora: Dani podría haber muerto y la chica que lo escribió no lo terminaba de superar y se imaginaba que se lo iba a encontrar en cada esquina y al final no era verdad.

De acuerdo, la solución más sencilla sería que, simplemente, Dani y la Chica (no sé qué nombre ponerle, pero la estaría rebajando si lo escribo en minúscula)   se conocieron en otra ciudad, que Dani se marchó a Madrid y perdieron el contacto. Pasado el tiempo, la Chica fue a Madrid, pero no sabía cómo contactar con él; quería verle pero no podía. Entonces, en una borrachera, le dio por escribir esa pintada en el Café Central.

Pero lo que me hace pensar que Dani está muerto es el sitio en el que está escrita la pintada: el  servicio de señoras. Está bien, está bien... en una borrachera no hubiese pensado dónde lo escribía. Pero sí que sabría que  era casi imposible que Dani fuese a ese lugar. Por eso creo que Dani murió: la pintada estaba en un sitio en el que él jamás la hubiese visto, porque en realidad ella no esperaba que la viese.

Vale. Donde quiero llegar con todo esto es que la vida es un poco así. Piensas en ciertas personas sin que ellos  lo sepan. Otras personas se acuerdan de ti sin que tú lo sepas. A veces es por cobardía, otras, por simple pereza. El caso es que al final no nos lo decimos. Y nos morimos sin saberlo.

Nos quedamos solos, sin saber quién piensa en nosotros y sin decirles a los demás que pensamos en ellos. Hasta que al final es demasiado tarde y se nos olvida o se olvidan de nosotros. Y nos morimos.

Y el mundo se convierte en un lugar un poquito más frío y más húmedo. Y no quedan paredes que nos susurren cuándo una persona huele a Jazz.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Tralarí

No quiero que mis días pasen de largo. Todo lo que haces cuenta. Todo lo que no haces cuenta más. No quiero esperar: angustia.

¿Por qué tengo que elegir? ¿Por qué no puedo tenerlo todo? ¿Por qué no puedo serlo todo?

¿Es soberbia tratar de conocer todo cuanto se pueda?

Quiero satisfacer todas mis curiosidades.

Por cierto: ¿A que está chulo el contador? ¿Y la lista es guachi chachi pirulachi? ¿Qué pensáis?

Se admiten sugerencias en cuanto a la estética del blog. ¿Alguien sabe cómo puedo cambiar lo de "comentarios" por otra cosa?

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Sobre las mandarinas

Bueno. Después de cinco días de existencia, he de admitir que los resultados logrados no han estado nada mal: 5 comentarios (uno de ellos, mío), 7 seguidores y 46 visitas (la mayoría de mi  madre y de mi abuela)...
Ante esta situación, considero que lo que se tercia es publicar una nueva entrada. Como introducción, he de decir que su tema ha requerido una gran consideración y maduración por mi parte. Es decir, que lo he pensado esta mañana en la cafetería.

Ahí va: ¿No piensan que la mandarina es la fruta con peor reputación?

Sí, lo sé...suena absurdo. Pero démosle una oportunidad:

Cuando llegan el verano y  la primavera, todos estamos deseando ir a la frutería (vale, la mayoría al súper) para poder comer fresas, cerezas, albaricoques, picotas (Mmmmm picotas), melocotones, sandías... y demás frutas de temporada.

Uno de los factores favorables que tienen el progreso y la globalización es que podemos comer estas frutas durante el resto del año (aunque a veces cuesten un ojo de la cara) importadas desde el otro hemisferio. También pueden ser cultivadas mediante...mediante...¡técnicas de cultivo no convencionales! (Sí, mejor ese nombre que el que les corresponde)

Pero: ¿Por qué no importamos frutas de invierno cuando estamos en verano? ¿No se han preguntado qué pasa cuando entra el otoño? Cuando empiezan a caer las primeras hojas, tratamos de sustituir nuestros albaricoques por ciruelas, uvas, higos...pero no es lo mismo. La euforia "frutívora" de la primavea no se repite en el otoño. Para cuando llega la época de la mandarina, ya estamos echando de menos las fresas.

Y por eso, las mandarinas son la fruta que peor nos cae. Yo quiero animales a cambiar la concepción generalizada de las mandarinas:
¡Este es un llamamiento a todos aquéllos que pasan buenos momentos comiendo mandarinas!
Porque se pasan, señoras  señores: seguro que más de uno de ustedes habrá dicho alguna vez eso de "Ay, mandarinas ¿Me das un gajo?" La mandarina es una fruta  que se comparte, que proporciona un momento de alivio en mitad de un día frío. Es una fruta imprevisible: nunca sabes si va a estar dulce o amarga, si va a tener pepitas o no...

Señoras, señores, animales y wookies: coman mandarinas.

(Ya les dije que se atuviesen a cualquier cosa en este blog...)

viernes, 10 de diciembre de 2010

Señora: ha tenido usted un blog

Pufff. Bueno... Primera entrada. Qué nervios ¿Qué escribo? Va. Da igual. Vamos allá:


¡Bien! Pues con esta entrada damos comienzo a: "No hacen falta Tripis". Un blog muy serio, de gran rigor científico, que será respetado y valorado por una selecta minoría de intelectuales escogidos de entre las más altas esferas. Vamos, donde voy a hablar de lo que me dé la gana. 

Partimos sin rumbo, un poco perdidos. De hecho: "Más perdidos que un Furby en la isla de Lost" (guiño, guiño)

Y ustedes se preguntarán: "¿Y por qué ese nombre tan raro?"  Y si no se lo preguntan, se lo voy a contar de todas formas:

"Tripi" es el nombre usado comúnmente para designar a la dietilamida de ácido lisérgico, también conocida como LSD o simplemente ácido. Bien. Esta sustancia con nombre de Teleñeco es una de las drogas alucinógenas más potentes que se conocen. De hecho, su dosis se mide en millonésimas de gramo.

El nombre de este blog surge para defender una perspectiva que trata de entender el mundo como un lugar alucinante, divertido, emocionante, misterioso... Donde predominan los colores hipersaturados (guiño guiño) y las personas tienen su propia banda sonora permanente.

Sean bienvenidos a la aberración, al abismo, al caos, a la incertidumbre, a la locura y la travesura. Crucen la puerta al mundo de la Entropía...